Acerca de Comunidad Ubu

“…ABSOLUTA REBELION FRENTE A LA TOTALIDAD DE LA SIMPLEZA…”

Los personajes tienen carácter simbólico ya que son figuras deshumanizadas y
despersonalizadas. Son personajes con una suerte de energía que no aparece en el
mundo real alejándose de arquetipos que responden a un estereotipo social, pero si
se exalta un rasgo que los caracteriza. El proyecto trabaja sobre una concentración de
las características de los personajes pero no sobre una síntesis. La materia se exagera,
se deforma, se animaliza caóticamente pero sin psicología alguna utilizando el recurso
de la marionetización..
A su vez, los personajes se construyen sobre la idea del anti-heroe, aquel héroe
“esperpéntico” sobre el cual pesa una fatalidad, un destino. Los personajes responden a
una doble dimensión de “héroes bufos”, tanto en la actitud como en la palabra; héores
degradados contra los cuales no cabe ni heroica rebelión ni aceptación heroica y a los
que se los despoja de la dignidad de su propia muerte.
Comunidad Ubú es un gran coro de personajes huecos, sin que su chatura
consiga disimular su vacío constitutivo ni la vulgaridad en la que viven sumergidos, y
de la que no intenta salir, incapaces de estremecerse antes la voz trágica del dolor y de
la muerte.
Los personajes se sumergen en un gesto de degradación hacia lo que suele ser
prestigioso, funcionando a través de una lógica invertida. Utilizando como elemento
fundante, la carnavalización en su carácter de inversión de los roles; personajes
dominados por los bajos corporales en esa mezcla de lo alto y lo bajo.
Inspirados en el sistema patafísico, se explora la risa en plenitud de lo patético que
implica hacer conscientemente lo que otros hacen de manera inconsciente.
La técnica de actuación desarrollada le es propia al grupo, creando así un modo
de actuar que es genuino del elenco. Desde el lenguaje y la palabra se trabaja sobre
procedimientos que se acercan a la deformación de palabras para su ridiculización y el
invento un idealecto particular. Los recursos de proliferación e hipérbole configuran
una realidad estética inobjetiva, construida sobre una realidad objetiva deformante como
contrapartida de la tragedia. La estética actoral acciona sobre lo obsceno y lo
escatológico poniéndola en función de ridiculizar los estereotipos, contra la idea del
decoro.